La Luna el éxito y la fortuna
Nuestro satélite no ha servido solo para regocijo de los amantes, poetas y dejar la dura huella de la bota de un astronauta. Su concienzudo análisis, a lo largo del tiempo, nos descubre su influencia en el éxito o fracaso de nuestra material y circunstancial vida. Descubramos a la Luna y sus mensajes ocultos…
Nuestra vida sublunar:
Selene, diosa griega asociada a la Luna, nos viene acompañando desde hace millones de años. Su influencia sobre las mareas, los cultivos, la caza y la pesca, el crecimiento, el tiempo y la natalidad son cada vez más evidentes. El reconocido Dr. Eugen Jonas, psiquiatra checo, llegó a la conclusión que el sexo viene dado por la posición de la Luna en el momento de la concepción, si está en un signo activo o masculino del Zodíaco (Aries, Géminis, Leo, Libra, Sagitario, Acuario) será varón. Por el contrario si se halla en un signo femenino (Tauro, Cáncer, Virgo, Escorpio, Capricornio, Piscis) será hembra.

La Luna y el éxito:

A lo largo de los años y de miles de estudios he llegado a comprobar que, según la Fase Lunar con la que hemos nacido, el éxito se hace más fácil y se obtienen mejores resultados al esfuerzo o deseos de la persona. Podríamos determinar que, el éxito o el fracaso, dependen en gran medida del tipo de Luna que tuvimos al nacer.

En el mundo del Arte es muy característico encontrar estos resultados. Artistas que en vida mostraban sus grandes aptitudes pero que su éxito, no aparecía hasta mucho más allá de su muerte. Mientras que otros, a muy temprana edad y con su Luna Llena natal acompañándoles, gozaban tempranamente de la “mieles del éxito”. Acaso en nuestra vida diaria no conocemos personas que más de una vez nos preguntamos ¿cómo es posible que esté donde está con lo torpe que es?… Ya lo decía el refrán ‘muchos son los llamados y pocos los elegidos’.
Si bien la Luna Llena aporta esta facilidad, no debemos olvidarnos del resto de las Fases lunares que también tienen su afortunado influjo, mediatizado por nuestros deseos y anhelos. Decíamos que la Luna Llena propicia luz y prosperidad, la Nueva que es la que no vemos en el cielo, ayuda a la introspección y a la labor solitaria. favorecerá a todos aquellos que realicen una vida de mayor contemplación e incluso espiritualidad. Llegarán a conocer en profundidad las verdaderas realidades de la vida por medio de sus numerosas experiencias. Los nacidos con Luna Creciente se mostrarán más vivaces y gustosos en la realización de nuevas y continuas empresas y metas. La suerte les llegará por el empeño y la debida concentración de sus energías en un asunto determinado. Los nacidos en Luna Menguante estarán más felices y se sentirán realizados en toda actividad que conlleve la ayuda a los demás y se sientan partícipes de nobles acciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario